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mediados del siglo XIX se construye una pequeña torre cuadrada con un reloj en el medio, sobre la muralla colonial, en la llamada ´Boca del Puente´. Esta era la entrada que comunicaba a los barrios de San Pedro, la Catedral y Santo Toribio con Getsemaní. Luego nace la idea de construir una torre, tal vez para mayor visibilidad del reloj público. El cartagenero y autodidacta Luis Felipe Jaspe la diseña. Con una base cuadrangular, dos cuerpos octogonales superpuestos, uno inferior más grande donde se encuentra la maquinaria del reloj y otro superior más pequeño donde se ubican las campanas, rematando en un chapitel de tres metros de altura. La ciudad comenzaba a renacer económicamente, así que, entre la idea, el diseño y la ejecución pasaron años. Finalmente, en 1887 Jaspe inicia los trabajos junto con el albañil Ignacio Acosta.
La torre se inaugura el 24 de febrero de 1888, día en que se conmemoraba el fusilamiento de los Mártires de Cartagena. En la Cartagena de Jaspe esta era una fecha muy importante, los padres de la mayor parte de los habitantes habían sido sacrificados en la reconquista española de 1815. La Torre del Reloj era el símbolo de un renacer social y económico que le dedicaban a quiénes habían dado su vida por la construcción de la naciente República.
Jaspe hace un ensamble perfecto entre las dos construcciones, la muralla colonial y la torre republicana. Este logro arquitectónico también es fruto de las habilidades y pericias de los albañiles y encofradores dirigidos por Acosta.
En ese momento la entrada amurallada constaba de dos bocas, la principal, sobre la cual edificaron la Torre del Reloj, y otra. En 1905 Jaspe abre una tercera boca o entrada para lograr una perfecta simetría. Hacia 1930 el arquitecto belga Gastón Lelarge alargó el chapitel en 3 metros, verticalizándolo.
La torre se inaugura el 24 de febrero de 1888, día en que se conmemoraba el fusilamiento de los Mártires de Cartagena.
La Torre del Reloj corrió el riesgo de ser demolida. A finales de los años 60 del siglo XX un español experto en fortificaciones coloniales sugirió demolerla, ya que según su criterio no debería estar sobre la muralla. Por fortuna los cartageneros protestaron en defensa de su torre e impidieron que semejante pretensión se realizara. Hoy la Torre del Reloj es el símbolo de Cartagena de Indias.